CURSOS DE REIKI EN LAS PALMAS DE GRAN CANARIA.
Reiki es una antigua técnica natural mediante la cual se canaliza Energía Universal a través de las manos. Está reconocida por la Organización Mundial de la Salud desde el año 2000 (puede leer más pulsando en Videos y artículos).
Cualquier persona puede aprender y practicar porque no es necesario ningún requisito previo ni cualidades especiales.
Esta práctica viene desde hace miles de años apareciendo y desapareciendo en diferentes épocas y civilizaciones (manteniéndose en secreto en algunos casos). Cada uno de éstas recibió una serie de conocimientos para trabajar con la energía y diferentes símbolos de poder para tratar con mayor efectividad los problemas propios de su tiempo. La energía a la que se refiere es la energía que está dentro de todas las formas de vida. No es la energía del maestro-terapeuta de reiki con lo cual no siente cansancio al realizar ésta técnica sino que la propia persona que la canaliza se queda con parte de esa energía y se beneficia a su vez de la práctica.
Por desconocimiento, las personas creen que el reiki es sólo un medio más para relajarse pero es mucho más que eso. Meditante la canalización del reiki a través del terapeuta de reki se revitaliza e incrementa el poder de autosación del paciente tanto en el campo físico, mental-emocional y en el espiritual tratándose cualquier problema. El terapeuta de reiki no sana al paciente sino que es el mismo paciente y gracias a la energía vital universal la que produce la sanación (aunque claro está el terapeuta es el intermediario y sin él no podría ocurrir esa transmisión de energía).
A su vez la práctica del Reiki es un camino de desarrollo personal.
El Reiki no es una religión ni exige ningún tipo de creencia ni proceso mental para que funcione.
Cualquier persona puede aprender y practicar porque no es necesario ningún requisito previo ni cualidades especiales.
Esta práctica viene desde hace miles de años apareciendo y desapareciendo en diferentes épocas y civilizaciones (manteniéndose en secreto en algunos casos). Cada uno de éstas recibió una serie de conocimientos para trabajar con la energía y diferentes símbolos de poder para tratar con mayor efectividad los problemas propios de su tiempo. La energía a la que se refiere es la energía que está dentro de todas las formas de vida. No es la energía del maestro-terapeuta de reiki con lo cual no siente cansancio al realizar ésta técnica sino que la propia persona que la canaliza se queda con parte de esa energía y se beneficia a su vez de la práctica.
Por desconocimiento, las personas creen que el reiki es sólo un medio más para relajarse pero es mucho más que eso. Meditante la canalización del reiki a través del terapeuta de reki se revitaliza e incrementa el poder de autosación del paciente tanto en el campo físico, mental-emocional y en el espiritual tratándose cualquier problema. El terapeuta de reiki no sana al paciente sino que es el mismo paciente y gracias a la energía vital universal la que produce la sanación (aunque claro está el terapeuta es el intermediario y sin él no podría ocurrir esa transmisión de energía).
A su vez la práctica del Reiki es un camino de desarrollo personal.
El Reiki no es una religión ni exige ningún tipo de creencia ni proceso mental para que funcione.
